La década a la que dedicamos este blog fue una edad de oro para los grandes conjuntos orquestales. Con un buen número de instrumentistas casi siempre anónimos, músicos de estudio que cumplían su cometido con enorme solvencia, ciertas formaciones adquirieron ribetes de leyenda, como MFSB, de Gamble y Huff, The Salsoul Orchestra, comandada por Vince Montana Jr., o The Love Unlimited Orchestra, a las órdenes de Barry White. En la misma línea se sitúa The Soul City Symphony, que fue el músculo sonoro de Van McCoy. A este compositor de simpáticas melodías -malogrado, pues murió antes de cumplir los cuarenta- le debemos The Hustle, tema que llegó al número uno del billboard estadounidense y que simboliza, con su elegante candidez, aquella chispeante alegría de vivir.
F.J.E.
Canción disco orquestal (la parte orquestal parece sacada de una serie de televisión de la época) con ese genuino toque de inocencia, alegría y ensoñación. Todo un clásico setentero.
ResponderEliminarR.O.C.